Que sí, que no, y nadie lo sancionó
Lo ocurrido el fin de semana último, durante el desarrollo de una de las semifinales del Torneo Oficial de la Zona Sur que disputaron Huracán de Guatraché y Gimnasia y Esgrima de Darregueira, dejó dudas e inquietudes, no sólo en los seguidores del “Globo”, sino también en la comunidad futbolística en general, que manifestó su preocupación por el nivel de los arbitrajes tanto dentro como “fuera” de la cancha.

Tal cual se informara oportunamente, el encuentro en cuestión (ida de las semifinales) había sido suspendido sobre el final del mismo cuando estaban 0-0, por una supuesta agresión al árbitro Guillermo Aguilera durante un tumulto desatado al momento de expulsar a un jugador de Huracán (Diego Millán).
En la semana, actuó el Tribunal de Disciplina para aplicar las sanciones correspondientes, pero llamativamente solamente suspendió provisionalmente al jugador Millán (tras ver la roja habría empujado a un árbitro asistente), pero no se expidió ni hizo mención alguna a los incidentes del final.
En ese contexto, allegados a la institución pampeana (Huracán) se interiorizaron sobre el tema, y no pudieron menos que sorprenderse por lo actuado por el árbitro Aguilera, quien se contradijo en dos oportunidades al presentar tres diferentes informes.

Los visitantes.
Acorde a la documentación a la que tuvo acceso LA CHUECA, el suplemento deportivo del diario provincial La Arena en la planilla del partido en principio Aguilera informó que el partido se había suspendido porque había sido golpeado por una piedra que cayó desde la parcialidad visitante (de Gimnasia), a los 95 minutos.
“Informo que a los 95 minutos de juego debí suspender el encuentro que fue interrumpido a los 92 minutos luego de una expulsión de un jugador de Huracán, del lado del asistente Nº 2, por lo cual se genera un tumulto de jugadores alrededor del asistente Nº 2. Voy a separar el tumulto y recibo un proyectil (piedra) de un tamaño considerable, el cual impacta detrás de mi oreja izquierda de la parcialidad visitante (Gimnasia y Esgrima). Fui atendido por la doctora del club local. Consta certificado”, explicó Aguilera en el sector de la planilla destinado a “observaciones” tras el encuentro, disputado el domingo 15 de julio.
Eso fue lo que justamente publicó LA CHUECA en la edición del lunes pasado, de acuerdo a lo que se había podido observar en la cancha, por lo que era probable que el Tribunal de Disciplina pidiera al menos un descargo a los involucrados.

Los locales.
Sin embargo, en el informe que el árbitro elaboró posteriormente, para enviar al Tribunal (vía fax desde Bahía Blanca), tuvo su primera contradicción, al señalar que en realidad la piedra había caído desde la tribuna local (de Huracán), además de dar detalles por la expulsión de Millán, pero sin hacer mención sobre si el partido fue suspendido o no.
En ese informe especifica lo siguiente en el sector dedicado a ‘explicación de los hechos’: “A los 92 minutos expulsé al jugador Nº 16, Millán, Diego, del club Huracán, a instancias del asistente Nº 2, Méndez, Diego. Una vez expulsado, dicho jugador le pega con los puños cerrados en el pecho al asistente Nº 2; no conforme emplea amenazas e insultos hacia el asistente en cuestión, diciéndole: (NdeR: detalla insultos). A raíz de este hecho varios jugadores de Huracán se acercaron rodeando al asistente en cuestión. Me acerco para separar y recibo un golpe producto de un proyectil (piedra), el cual impacta en mi cabeza, de parte del sector local”.

¿Locales o visitantes?
Ante las dos posturas de Aguilera (agresión desde la tribuna visitante primero, y desde la tribuna local después), al parecer desde el Tribunal o la Liga le habrían solicitado alguna explicación al colegiado, quien siguió “oscureciendo” con su “aclaración”, porque no sólo señaló que el partido no se había suspendido (como informó el día del encuentro), sino que también apuntó que no sabía desde qué tribuna había sido arrojado el proyectil.
En una misma planilla de “explicación de los hechos”, Aguilera sorprendentemente detalló: “1) Rectifico el informe señalando que el partido fue dado por finalizado, dado que se había cumplido el tiempo reglamentario. 2) En relación a la agresión recibida, no logro identificar a quién pertenecía la parcialidad que arrojó el proyectil, dado que lo ocurrido sucedió en medio de un tumulto”.
¿Agresión de los locales o de los visitantes? ¿Suspensión o finalización del tiempo reglamentario? Aguilera fue pura contradicción, y el Tribunal actuó como si nada hubiera ocurrido, pero lo cierto es que algo pasó. Y esto es lo que preocupa a los seguidores del fútbol de la Zona Sur, porque no es la primera vez que las cosas suceden así, que pasa pero no pasa…; un camino peligroso que toda la dirigencia debería corregir a tiempo para evitar el lamento de alguna situación sin retorno.

Los de las revanchas
Los árbitros bahienses Daniel Van der Ploeg y Jorge Benítez fueron designados anoche, tras un sorteo, para dirigir los partidos de vuelta de las semifinales de la Zona Sur de la Liga Cultural de fútbol. Van del Ploeg quedó sorteado para impartir justicia en la revancha del duelo entre Gimnasia y Esgrima de Daregueira y Huracán de Guatraché, que en la ida terminó 0-0 y con incidentes; mientras que Benítez será el encargado de dirigir el choque entre Independiente de Jacinto Arauz y Unión de General Campos, que en la ida finalizó 4-2 a favor del “Tambero”.
Los dos árbitros fueron incluidos en un sorteo junto a Leonardo Villamil y Martín Buiani, quienes no resultaron favorecidos para dirigir en estos dos encuentros, que definirán nada menos que dos de los clasificados al Provincial.
(La Arena)

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