La municipalidad de Santa Rosa compactó por primera vez vehículos secuestrados que permanecían en el corralón sin que sus dueños los reclamen, con el consecuente deterioro que incide en la seguridad vial, y convirtió 592 motos y 15 autos en chatarra, que luego pondrá a la venta.
El dispositivo lo encabezaron hoy autoridades del Jugado de Faltas y la Dirección de Tránsito de la capital pampeana, en virtud de una medida adoptada en 2013 respecto a los rodados retenidos en operativos viales, tras permanecer más de seis meses en el corralón municipal sin que los retiren.
La medida se basa en la disposición de una ordenanza de 2010 que precisamente autoriza al municipio capitalino a la compactación de esas unidades, tras cumplimentar una serie de pasos como la publicación de los edictos pertinentes y la notificación a los respectivos dueños, cuya falta de respuesta revela que no tienen voluntad de recuperar el rodado.
El material resultante será en poco tiempo más puesto a subasta por la comuna, proceso para el cual se deberá delimitar diferentes lotes chatarra y designar un martillero por medio del Colegio de Escribanos.
