Las derivaciones de las causas de Juan Ignacio Suris no tienen fin. Ahora, en la investigación por el delito de asociación ilícita fiscal, la Justicia Federal avanza contra las empresas que le compraban facturas truchas al detenido con el fin de evadir al fisco. Entre ellas, aparecen la Cooperativa Obrera e Ítalo Manera.
Tal como lo informó LA BRUJULA 24, Suris -además de la causa por narcotráfico- quedó procesado y detenido tras ser acusado de liderar una banda que se dedicada a crear empresas fantasma para vender facturación apócrifa a gran escala.
En su resolución, el juez federal Santiago Ulpiano Martínez señaló que “estamos en presencia de sociedades creadas al solo efecto de generar operaciones ficticias con el fin de ofrecer comprobantes que los usuarios tomaban a cuenta de Impuestos de IVA y Ganancias”.
Además de Suris, quedaron procesados todos los integrantes de su organización: el piloto de Turismo Nacional Juan Pipkin, Eduardo Suris (padre de Juan), el contador Domingo Goenaga, Nicolás Ibarra Gutiérrez y Flavio Rodrigo Carrano.
En los últimos meses, el Juez y los inspectores de la AFIP se dedicaron especialmente a rastrear a las empresas que recibieron facturas truchas provenientes de las usinas que controlaba la organización delictiva.
En el voluminoso expediente judicial, además de la Cooperativa Obrera y Manera, figuran otras reconocidas empresas y sociedades de la ciudad: Bahía Verde S.A; Ingeniería Reyes; Forest Car S.A; Servicio Industrial Naval S.A; Resco SRL; Plusagua S.A; Minutillo Hermanos; Matferroso y Mapsa Ingeniería S.A; Francisco Díaz S.A; Bernardo Lew e Hijos SRL y Juan y Antonio Cucchiara”.
Entre muchas otras, las mencionadas firmas serían las que, en un primer análisis, superararían los montos de evasión previstos por ley y que, por ende, ameritan la formación de una causa penal. Para el juez se trata de los “usuarios más frecuentes” de las facturas “made in Suris”.
En cambio, otras empresas que también adquirieron ese tipo de facturas no superan los 100 mil pesos de evasión por impuesto y por período fiscal.
En la Ley Penal Tributaria, en 2011 se introdujeron cambios, sobre los montos evadidos pasibles de sanción. La “evasión simple” se produce cuando lo “estafado” al fisco supera los 400 mil pesos. Anteriormente, el límite era de 100 mil pesos.
En el caso de “evasión agravada”, que tiene penas más duras, el monto límite pasó de 1 a 4 millones de pesos de evasión. Las empresas investigadas hasta hoy son más de 190. Hay de Bahía Blanca y de otras ciudades del país.
Los “efectos colaterales” de los delitos cometidos por Suris y su gente seguirán teniendo impensados “efectos colaterales”.
Fuente y foto La Brujula 24