Un joven araucense, que se identificó como Eric Goycochea Davyt, denunció haber sido presionado por la policía para hacerse cargo del robo de los banderines de la cancha del Club Villa Mengelle, ocurrido el 15 de julio pasado.

En una nota enviada al matutino provincial LA ARENA, Davyt hizo referencia al artículo publicado el 19 de agosto, donde se dio a conocer la información policial que un joven había sido notificado a disposición de la Justicia, involucrado en los hechos vandálicos denunciados por la institución deportiva. Explicó que fue citado a la comisaría de Jacinto Arauz, donde se presentó en forma inmediata ante el subcomisario Héctor Zapulla.
Dijo que en ese momento el policía le solicitó que diga donde estaban los banderines de la cancha. “Le contesté que no sabía nada” y en forma intimidatoria y amenazante, el subcomisario me dijo: “Dale confesá, que ya declararon en tu contra”. Agregó que ante la negativa a declarar hechos que nunca cometió, lo llevaron a la celda, le retiraron el celular y lo incomunicaron durante más de dos horas.
El joven manifestó que el subcomisario le insistió en que diga lo que pasó, porque iba a ser peor. “Me increpó y en un tono amenazante me dijo que me iban a involucrar con lo de las pintadas de aceite en la cancha. En ese mismo momento el oficial simulaba hablar con el juez y sostuvo que el tema estaba complicado y que si yo declaraba ellos me podían ayudar”.

Presiones.
Resaltó que la situación se volvió tortuosa. “Las presiones sobre mi persona, y el temor de lo ocurrido hace pocos días en la comisaría de General San Martín, donde un joven conocido, fue brutalmente golpeado en la celda, obligaron a que finalmente diga que había retirado los banderines, hecho que no es cierto y que me vi obligado a decir a consecuencia de las amenazas y presiones del subcomisario”.
También dijo que se le impidió hablar con un abogado, pese a que su madre se había comunicado con el letrado, quien además, “inmediatamente se comunicó telefónicamente con el subcomisario solicitándole hablar conmigo. Zapulla le negó la comunicación informándole que iba a realizar una declaración espontánea y que ya había conseguido testigos para que refrendaran los dichos”.
A raíz de lo ocurrido, “el 17 de agosto me dirigí a realizar la correspondiente denuncia penal, no sólo por haberme obligado a declarar un ilícito que nunca cometí, sino también por haberse vulnerado mis derechos, afectando el legítimo proceso y las garantías constitucionales” señaló. Y agregó: “Considero fundamental el esclarecimiento de los hechos denunciados, pero de ninguna manera se pueden esclarecer los ilícitos con hechos abusivos de los servidores públicos, que deben resguardar por la seguridad individual y social de todas las personas” cerró.
Consultado el subcomisario Zapulla, sobre la denuncia dada a conocer por el joven, expresó que oficialmente no tenía conocimiento de ella. “Cualquier información debe ser requerida al Ministerio Fiscal de General Acha, quien interviene en las actuaciones”.

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