La policía informó hace instantes que a las 9:50 horas, fue notificada de la existencia de dos menores de edad, atados en el interior de un galpón utilizado como taller, ubicado en calle Teniente Daza 137 entre Moreno e H. Irigoyen de Puan.
Inmediatamente, el comisario Juan Carlos Jaime junto a personal policial se constituyó en el lugar y constató que “el taller se hallaba sin moradores y que efectivamente en su interior, se hallaban dos pequeños de sexo masculino, amarrados a sendas sillas. El galpón además presentaba las ventanas tapadas impidiendo la visión desde el exterior”.
Según se detalló desde la Estación de Policía Puan Primera, son dos niños de cinco y dos años de edad respectivamente.
“Cuando se ingresó al lugar, se pudo observar que los mismos presentaban signos de haber sido recientemente golpeados, además de tener lesiones de antigua data,” describieron en el informe.
“Al momento del operativo, arribó el propietario del lugar, identificado como Mauro Ricardo García, argentino, de 34 años de edad, domiciliado en el lugar, quien se movilizaba en un automóvil marca Volkswagen Polo de Color Blanco, junto a su concubina y progenitora de los niños. De inmediato el sujeto fue aprehendido, por hallárselo incurso in fraganti en los delitos de privación ilegal de la libertad y lesiones leves,” indicaron.
Por otra parte, la policía informó que no se adoptó medida procesal alguna para la progenitora de los menores, debido que la misma presentaba un avanzado embarazo, quedando su situación procesal a consideración de la Fiscalía interviniente.
García, quien además fue imputado por el delito de “Abandono de Persona” fue alojado en carácter de comunicado en la Estación de Policía local, a disposición de la U.F.I nro. 12 a cargo de la Dra. LEILA VIOLETA SCAVARDA, del Departamento Judicial Bahía Blanca.
Los niños quedaron internados en el hospital local por su avanzado estado de desnutrición, luego de la medida de abrigo adoptada por el Grupo local de Promoción y protección de los derechos del Niño del Municipio de Puan.-
Informe médico de los niños hallados en cautiverio
En diálogo con TLVP, el Director del Hospital Gobernador Ugarte, Dr. Franco Llamas, habló sobre el estado de salud de los niños que estuvieron atados y encerrados dentro de un galpón, ubicado en la zona céntrica de Puan.
“Más allá de los golpes y los hematomas que presentan en sus cuerpos, sufren las causas de los, aparentemente, 10 días durante los que estuvieron atados, sumado a la poca alimentación y a una hidratación bastante pobre,” explicó.
En cuanto al estado de desnutrición, Llamas dijo que el más afectado es el niño de tres años.
“Se nota en él que la nutrición era bastante pobre y no desde ahora, sino de antes. El más grande es más fornido. Ahora les estamos haciendo todos los controles, sobre todo por los golpes porque presentan bastantes moretones,” relató.
Acerca del estado psicológico y conductual de los niños, Llamas señaló que se comunican acorde a su edad.
“Con el paso del tiempo vamos a ver qué consecuencias puede acarrearles la experiencia que vivieron.
En estos días vamos a ver cómo evoluciona el tema conductual y proceder a ver si tienen todas las vacunas. Mañana (por el jueves) tendremos el resultado de los análisis y las placas. Van a estar unos días en el hospital”, admitió.
En cuanto a la alimentación, el profesional explicó que, en el estado de cautiverio, los niños recibían alimento.
“La madre contaba que los desataba y les daba de comer cuando él (por el padre) no estaba. Cuando el hombre volvía los ataba nuevamente. Ella también es cómplice y los chicos habrían dormido atados o en el piso.
Se los nota (a los niños) ojerosos y el más chiquito está pálido”, consideró.
Llamas relató que, en su carrera profesional, situaciones de esta naturaleza le han tocado vivir, pero no acá en Puan.
“En la ciudad se ven casos, pero de esta magnitud creo que nunca he visto. Lo que pasó acá es decir que los chicos estaban literalmente atados a una silla, dormían en piso o en la misma silla. Teniendo en cuenta las altísimas temperaturas de los últimos días, el desenlace podría haber sido mucho peor.
Cuando le preguntamos a la madre si esta situación de maltrato existía desde siempre, ella comentó que el detonante fue en los últimos diez días. ‘No sé qué le agarró, los culpaba de haberle rayado el auto o romperle el paquete de cigarrillos’, nos decía la mamá en su relato”, expresó Llamas.
Son argumentos que no tienen sentido”, concluyó.
Fuente Todas las Voces Puán