Por Mario Higonet
Les solicito a modo de exigencia, en carácter de ex-jugador, directivo de la Liga Cultural y hoy como periodista vinculado con “nuestro fútbol”, a los dirigentes de los clubes prohíban la presencia dentro del campo de juego de ciertos árbitros cuyas condiciones generan incertidumbre, zozobra y a veces sospechas de favores. En la noche de ayer 14 de junio, en el partido entre Independiente de Jto Arauz y Unión de Gral Campos, el árbitro Mario Ciraudo merced a su estado físico no adecuado, y quizá por algunos fallos erróneos generó un cuadro de enojo, con cruces verbales, amenazas y arrojo de distintos elementos.
También les exijo por la seguridad de todos los simpatizantes, prohíban a modo de sanción el ingreso al estadio en algunos partidos, a aquellos hinchas que se muestran con signos de violencia, sin advertir ponen en riesgo a la institución, jugadores, y al grueso de la “hinchada”. Mi objetivo es mejorar nuestra calidad de vida, gracias.
El partido finalizó 3-1 a favor de Independiente, que había terminado perdiendo 1 a 0 en el primer tiempo, merced a una linda definición de Giuliano Antilao en el minuto 17. En los segundos 45, con goles de Batalla a los 10’, Gaviot sobre los 30’ y Hernández a los 48’, el local “lo dio vuelta” y se quedó con los tres puntos; por ahora se ubica –la fecha se completa este domingo 16- como único puntero del Clausura en la zona sur. Hubo 4 expulsados: Navarlat y Batalla en el local, Trivero y Novak en el Tambero.-
Asi higonet por fin.