El mandatario comunal refutó los términos de la denuncia periodística de la exempleada Graciela Zapata y explicó las razones de su decisión. Negó la existencia de una ‘crisis’ política y redobló la apuesta: anunció que se postulará nuevamente en el 2015.
Vehemente y con un voluminoso legajo de documentación probatoria de sus dichos, el intendente municipal Néstor Hugo Tribolo negó terminantemente que la exoneración de la empleada Graciela Zapata sea una persecución política; “hace seis años que vienen diciendo eso, pero terminaron reconociendo ante la Justicia que eran responsables de los delitos que se investigaban”, ejemplificó.
En el transcurso de la entrevista realizada por un corresponsal de este medio reconoció que, “efectivamente, quiso que la recibiera después que fue notificada de la medida y no la recibí porque no creo que hubiera mucho para hablar después de todo lo que se ha dicho. Yo creo que al lugar que tienen que ir es a la Justicia”, recordó.
“¿Persecución? -se preguntó Tribolo- no sé a qué le llama persecución. La he llevado a Santa Rosa todas las veces que quiso viajar, le he pagado los pasajes de la hija a Pico todo el año pasado para que fuera a estudiar, nunca la molesté en su puesto de trabajo… esto que se decidió no es una persecución política, sino la consecuencia lógica de un fallo judicial que dictó sentencia en una causa donde ellas aceptaron su responsabilidad en los hechos que se le imputaban. Estamos hablando de peculado, fraude a la Administración Pública y abuso de autoridad”, reflexionó.
“Miente totalmente cuando dice que se le descontaron días de inasistencia por enfermedad”, afirmó. “Nunca, ni a ella ni a ningún empleado de la Municipalidad se les descontó un día inasistido cuando traen el certificado médico correspondiente. Se le descuentan cuando dicen que van al médico pero no traen ningún certificado, no sólo a ella, sino a cualquier empleado”, informó.
“En cuanto a las becas, no tengo nada que ver, esas son decisiones del organismo provincial correspondiente”, rechazó. “Lo que ocurrió es que el primer año le dieron la beca para la hija, pero al segundo se la negaron por que figuraba que era la propietaria de un auto nuevo. Al año siguiente se intentó nuevamente cuando ya lo había transferido y se la dieron. Finalmente la perdió porque la hija dejó de estudiar en la Facultad en Santa Rosa y siguió sus estudios en un instituto privado de General Pico. Ahí fue cuando empecé, como una ayuda, a pagarle los gastos de pasaje todas las semanas cuando viajaba a Pico para estudiar. Tengo todos los recibos firmados”, ofreció.
“Otra cosa que quiero aclarar, antes que nada, que no se le hicieron diez denuncias ni nada por el estilo. De mi parte, existe una sola denuncia judicial donde no se la nombra a ella ni a ninguna otra persona. Simplemente se pone en conocimiento de la Justicia las irregularidades que se habían detectado durante la Auditoria que se efectuó y eso en cumplimiento de una Ordenanza votada por unanimidad por todos los integrantes del Concejo Deliberante que asumieron en el 2007. Las irregularidades fueron investigadas por el Juez Tolosa, la fiscal Hernández y un perito contador que hizo cuatro peritajes”, aclaró el mandatario comunal.
“No creo que la medida de exoneración haya sido sorpresiva, hubo un sumario administrativo previo, del cual fue debidamente notificada, donde tuvo todas las oportunidades de defensa porque incluso, se le concedieron los plazos que pidió”, alegó Tribolo.
“Que quede claro, yo no eché a una peronista, eché una empleada que reconoció ante la Justicia haber cometido peculado en la Municipalidad y el peculado es el delito más grande que existe en la función pública. Y en la Ley 643 que es el Estatuto del Empleado Público, está clarito que el haber sido condenado por este tipo de delito es causal para la exoneración”, razonó el mandatario comunal.
“No tiene nada que ver que ella sea ‘marinista’. Yo soy ‘peronista’, siempre voté candidatos peronistas, incluso a Marín en su momento. Estoy identificado con una línea interna que es ‘Compromiso Peronista’, liderada por el gobernador Jorge, pero no tengo nada contra los marinistas. En la Municipalidad deben ser varios los marinistas y jamás tuve ningún problemas con ninguno de ellos”, acotó Tribolo.
“Dicen que la Unidad Básica me pidió la renuncia, la verdad, a mí no me llegó nada y cualquier nota que quieran hacerme llegar tendrá que tener firmas responsables… pero, además, creo que está equivocados. Las Unidades Básica están acéfalas. Recién se normalizarán el 30 de agosto, cuando asuman las nuevas autoridades partidarias”.
Tribolo se mostró escéptico de que la exintendenta Cristina Paso sea la Jefa del peronismo local, “hoy por hoy, el intendente justicialista soy yo, mañana la gente dirá ‘respondió y negó que hubiera una crisis política’, eso es algo que inventan ellos, acá hay gobernabilidad y las instituciones funcionan normalmente”.
“Además -se explayó el intendente-, ellos no son quiénes para pedirme la renuncia. Yo estoy cumpliendo con el mandato popular hasta el 2015. Al único que le daría mi renuncia si me pide que dé un paso al costado es al gobernador Oscar Mario Jorge, pero es al único. De lo contrario seguiré gobernando hasta el 2015 y, en el 2015, si la salud me ayuda, me voy a volver a postular por Compromiso Peronista y ahí veremos si tengo la credibilidad de la gente y, si no, me voy a mi casa”, aseguró.
En el final de la entrevista Tribolo dejó en claro “que si me toca perder, sabré asumir la derrota. No me voy a esconder, ni voy a dejar de entregarle las llaves al que sea, peronista o radical, y les voy a pedir que hagan las auditorias que quieran porque sé cómo recibí la Municipalidad y cómo la voy a dejar el día que me toque irme. Porque tengo la tranquilidad de toda una vida de trabajo y honestidad”, finalizó.
Fuente La Reforma
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