Guatrachenses por el Mundo: Oscar Schenkel desde Puerto Madryn, Chubut.

Del campo a la ciudad
Nació un 4 de Mayo de 1963 en la vecina ciudad de Darregueira. Hasta allí debieron trasladarse sus padres Arnaldo y Elvira, quienes en ese momento vivían y trabajaban en la Estancia La Julia.
Cursada la primaria en la Escuela 60 y secundaria en el nocturno, primera promoción, se conocieron con Liliana Portada en el legendario Kitova, casándose el 18 de enero de 1985 en la localidad de donde era oriunda su mujer, Santa Teresa.A 25 años de esa unión la familia luce agrandada: “tengo 3 hijos: la mayor, Anahí de 25 años, Debora de 20 y Alexis de 16. Aunque ahora se sumó mi primer nieto Bautista, hijo de Anahí y su esposo Ezequiel, también pampeano, de Santa Rosa y de profesión topógrafo”, comenta.

La música en las venas
Desde pequeño comenzó a despertarse en Oscar la pasión por la música, siempre cautivado por aquellos sonidos que escuchaba a menudo en reuniones de familia o amigos, “siempre me gustó la música tanto folklore como la tradicional de mi raza”, explica: “comencé tocando el bombo y haciendo folklore junto a la guitarra de Carlos Schumann, después continué con Roberto (el negro) Lasagno, y por último también hice algo con Pancho Tindiglia, en forma esporádica cuando el recién se iniciaba”.
Ya a mediados de la década del ´80 comenzaban a surgir en todo el país los conjuntos musicales que interpretaban música de los Alemanes del Volga, que hasta esa época eran muy pocos. Y Guatraché no fue la excepción, “en 1986 empecé con el tema de la orquesta de música bailable, con José Lehr formamos el Grupo Venus. Con él estuve un año y medio mas o menos hasta que me vino a buscar Juan Carlos Klobertanz  para integrar Los Cometas, donde estuve tocando y cantando ininterrumpidamente hasta el 98, año en que me vine a Madryn”, nos cuenta.

Los Cometas deleitaron con su estilo muchas fiestas. La voz y la animación de Oscar, tan particular e inconfundible, marcaron una época, “fue una etapa muy linda. Esta foto es del último tiempo con Los Cometas. Con ellos anduve por Bahía, Cerri, Punta Alta, Santa Rosa, y toda la región, aunque lo mas fue cuando nos llamaron a tocar en San Miguel, en el gran Buenos Aires”.

La vieja 88.5
“En la FM del Pueblo tuve la oportunidad de estar casi desde el comienzo”, recuerda con entusiasmo: “conducía un micro-programa de la Cooperativa Agrícola relacionado con el campo, donde hacíamos comentarios relacionados al mercado de cereales y hacienda. Esto lo hicimos hasta el ´93, año en que dejé mi trabajo en la Cooperativa Agrícola Ganadera de Guatraché”.
Habiéndole encontrado sentido y gusto a la radio, Oscar decide emprender un nuevo desafío y así hacer, que la gente comparta, disfrute y se divierta con la música popular, “comencé con un  programa de tango y folklore que iba todos los domingos a media mañana, fue el primer programa que tuvo la radio de ese estilo. Y recuerdo los comienzos en el reducido estudio de la calle Colón y la inauguración de los estudios de la calle Alberti, donde también tuve la oportunidad de trabajar en esa nueva etapa que se iniciaba”.
“¿Anécdotas?, la verdad que hacer radio en ese momento ya era una anécdota, porque todo se hacía a pulmón, inventando sobre la marcha, como cuando una vez que salimos en el móvil Peugeot 404 a hacer exteriores, y cada vez que salíamos al aire con la vibración del auto se nos desconectaba el equipo de la batería”, se ríe. 

El desarraigo obligado
Cada mudanza es un historia diferente. No es lo mismo partir persiguiendo un sueño que irse obligado por una situación económica que hace difícil cualquier proyecto de vida en el lugar de origen.
“¿Porque Puerto Madryn?, porque en aquel momento habíamos enviado cartas a muchos lugares y sabíamos, –por lo que habíamos podido averiguar– que el Hogar Emanuel de Puerto Madryn, un Hogar Diurno para niños carenciados o en situación de riesgo social, de 6 a 12 años, perteneciente a la Iglesia Evangélica Luterana Argentina, necesitaba un coordinador ya que el que estaba había renunciado. Es así que nos llamaron para que fuéramos con un contrato de dos años”.
Oscar cuenta que luego de ver unos videos del lugar no dudó demasiado de la oportunidad que se les presentaba: “En nuestro caso teníamos kiosco en el Fonavi 32, pero nos agarró la crisis y casi perdemos todo, vendimos el auto para cancelar deudas, liquidamos todo y nos fuimos con el dinero justo como para pasar el primer mes, no fue nada fácil, y menos con tres chiquitos, pero no nos quedaba otra”, asegura.
Y prosigue: “al terminar los dos primeros años nos ofrecen continuar y aceptamos, renovando el contrato cada dos años hasta el 2006 en que decido cambiar por mi actual profesión de preventista, la cual confieso es mucho mas rentable”.

Hogar de la Ballena franca
Se entusiasma y se corta solo al hablar de su nuevo domicilio, “Puerto Madryn es una linda ciudad del Chubut, con unos 80.000 habitantes, que a diferencia de mi pueblo hay que acostumbrarse a un movimiento totalmente distinto, costumbres diferentes, otros recaudos a tomar en todo sentido, una economía diferente. Esta ciudad tiene como principales fuentes de ingreso, la fábrica de Aluminio ALUAR, la pesca, los pórfidos, el puerto y el turismo todo el año, ya que en invierno es el principal punto de llegada de la ballena franca austral y en verano, una extensa playa donde podemos disfrutar del sol y darnos un chapuzón en el mar”, explica y aclara: “Con respecto a Guatraché, confieso que si no hubiese sido por los motivos económicos era para no haberse ido. No sé si me acostumbraría a la tranquilidad impagable de allá, pero no creo que se pueda dar una posibilidad de retornar. Cuando uno se va es como que la puerta se cierra pero uno no se puede olvidar de sus orígenes, menos si es la tierra que eligieron mis bisabuelos para vivir”.
“Lo mismo las comidas, que a pesar de no estar en Guatraché las degustamos igual, agregando el sabroso corderito patagónico. A pesar de los años sigo y seguiré siendo hincha de la Gran Estrella del Sur PAMPERO, aunque acá obviamente somos hinchas del Deportivo”.“De Madryn destaco la belleza natural y las posibilidades laborales que siempre hay a pesar que estamos en un momento difícil”.
“¿El desarraigo?, es duro y doloroso pero gracias a Dios y a una familia que tengo que es excelente pudimos sobrellevar todo, aunque cada vez que vamos se nos llenan los ojos de lágrimas”, concluye.

Un Guatrachense en el Argentino “B”
Llegaba a su fin 1996 y Pampero de Guatraché coronaba un año soñado obteniendo los torneos de la liga Cultural y el Mayor. Eran épocas que la Estrella ganaba a cuanto rival se le ocurriese enfrentar, arrasando y opacando a los demás con un equipo que habría de quedar para la historia en la memoria de sus hinchas.
Bajo los tres palos, Gustavo “El Gato” Coria, de muy buena técnica para el puesto, hacía de las suyas en cada partido poniendo en práctica su agilidad felina como aguafiestas de los delanteros rivales. Y detrás del alambrado, un niño de solo 4 años se colgaba alentando  como un adulto a su ídolo, “el gato”, soñando con convertirse algún día en arquero de fútbol.
Nacido en Guatraché, hoy Alexis Schenkel de escasos 16 es el tercer portero del primer equipo de Club Social y Deportivo Madryn que disputa nada menos que el Torneo Argentino “B”. Juega allí desde los 6 años y  hace dos meses tuvo la oportunidad de su vida cuando viajó a Buenos Aires a probarse en varios clubes de primera división, River, Velez, Lanus y Argentinos Juniors. Allí quedó su ficha y la esperanza de que lo llamen, que no está lejana, como su sueño.
La vida, ese aprendizaje diario
Habiendo hecho “de todo un poco en la vida” para mantener a su familia, también tuvo tiempo para un breve paso por la política. Fue concejal durante el período 1991-1995 representando a la ya desaparecida Convocatoria Independiente. Eso le permite opinar con conocimiento de causa: “creo que los guatrachenses deberían por ahí tomar un poco de conciencia acerca de una importante fuente de ingresos que hay dormida que es  la laguna y el turismo termal, aunque falte quizas desición de llevarlo adelante”.
Hoy, Oscar y su familia viven en una ciudad donde la industria de la hospitalidad se desarrolla exponencialmente, dandole trabajo a mucha gente y poniendolos en contacto con todo el mundo como ninguna otra a través del aprendizaje de la geografía, la historia y las diversas formas de interpretar la realidad.
¿Hay mas guatrachenses por alli?, le preguntamos. “si, hay mucha gente de la zona, y por supuesto de Guatraché con los cuales nos solemos encontrar, además yo tengo comercio de lencería en el centro de la ciudad y suelen pasar por allí”, confirma.
Son las 20 horas, “mañana es el dia de la madre y tengo que ocuparme de los viejos que han venido a visitarme”, se disculpa . Es el final de la entrevista, y Oscar demuestra que pese a la distancia se puede ser feliz en cualquier lado, rodeado de los afectos y los amigos nuevos. 
Puede decir que encontró su lugar en el mundo….. la estabilidad laboral y la felicidad vinieron por añadidura.

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