El emergentólogo Germán Luna definió: “el complejo proceso que atraviesa la atención de una persona posiblemente contagiada de COVID-19 se asemeja a una escalera: importa tener una buena base, y en este caso la base debe ser la óptima recepción de los pacientes, lo que llamamos el Triage”.
Germán Luna es un pampeano nacido en Victorica, criado en la localidad de Anguil, que luego formó sus estudios como profesional de la salud en la provincia de Córdoba, para convertirse en médico generalista y emergentólogo, ocupando un eslabón fundamental en la Salud Pública de La Pampa, enmarcada en la pandemia por COVID-19.
Dentro del Sistema Público de Salud, Luna es el encargado de garantizar la fluidez y agilidad a la hora del ingreso hospitalario de los pacientes, que puedan registrar sintomatologías similares a un posible caso sospechoso de coronavirus.
“En el Centro Emergente de Asistencia Respiratoria (CEAR) trabajé en todo lo que es la organización, evaluación y Triage (método de selección y clasificación de pacientes). Dentro de lo relacionado con enfermedades respiratorias, el 85% de los pacientes tienen patologías ambulatorias, por lo tanto es importante contar con un grupo de personas que seleccionen eficientemente al sector de la población que debe ser evaluada. De ese modo se permite discernir entre los pacientes que van a continuar con un criterio ambulatorio de los que se tienen que internar”, explicó.
Una vez ingresado al sistema de Salud y derivado del Triage, el paciente pasa a una segunda instancia. “Las evaluaciones de ingresos de los pacientes hospitalarios se hacen en diferentes puntos, se han generado entrenamientos a personal de seguridad y administrativo de la Salud en diferentes etapas para que las personas sean dirigidas en el ingreso hospitalario. Los que son de carácter respiratorio o con sintomatología similar a la del coronavirus son enviados al Centro Emergente de Asistencia Respiratoria, caso contrario se quedan en la Guardia Central del Hospital Lucio Molas. La segunda selección de pacientes la realizan profesionales sanitarios y médicos que valoran y categorizan a esos pacientes que presuntamente tienen problemas respiratorios, y definir si son de carácter ambulatorio, se internan en clínica médica o en terapia intensiva”, detalló.
Dentro del Sistema Público de Salud, Luna es el encargado de garantizar la fluidez y agilidad a la hora del ingreso hospitalario de los pacientes, que puedan registrar sintomatologías similares a un posible caso sospechoso de coronavirus.
“En el Centro Emergente de Asistencia Respiratoria (CEAR) trabajé en todo lo que es la organización, evaluación y Triage (método de selección y clasificación de pacientes). Dentro de lo relacionado con enfermedades respiratorias, el 85% de los pacientes tienen patologías ambulatorias, por lo tanto es importante contar con un grupo de personas que seleccionen eficientemente al sector de la población que debe ser evaluada. De ese modo se permite discernir entre los pacientes que van a continuar con un criterio ambulatorio de los que se tienen que internar”, explicó.
Una vez ingresado al sistema de Salud y derivado del Triage, el paciente pasa a una segunda instancia. “Las evaluaciones de ingresos de los pacientes hospitalarios se hacen en diferentes puntos, se han generado entrenamientos a personal de seguridad y administrativo de la Salud en diferentes etapas para que las personas sean dirigidas en el ingreso hospitalario. Los que son de carácter respiratorio o con sintomatología similar a la del coronavirus son enviados al Centro Emergente de Asistencia Respiratoria, caso contrario se quedan en la Guardia Central del Hospital Lucio Molas. La segunda selección de pacientes la realizan profesionales sanitarios y médicos que valoran y categorizan a esos pacientes que presuntamente tienen problemas respiratorios, y definir si son de carácter ambulatorio, se internan en clínica médica o en terapia intensiva”, detalló.