El pueblo de los Echeveste y la primacía de las intendentas
En Telén la política parece llevar el apellido Echeveste: en los últimos veinte años ganaron cuatro de cinco elecciones, y en octubre puede pasar lo mismo. En Winifreda, en las últimas dos décadas solo hubo mujeres a cargo de la intendencia.
Norberto G. Asquini
Más allá de los análisis provinciales macro sobre la política pampeana, en cada pueblo hay una lógica local que podemos considerar como parte de la micropolítica en La Pampa. Y en ese marco hay dos localidades que tienen sus particularidades: una es Telén, donde en los últimos veinte años hubo cuatro de cinco intendencias con el apellido Echeveste -y posiblemente pueda mantenerse esa tendencia en el próximo período-; y la otra es Winifreda, que desde hace dos décadas es gobernada por mujeres, cuando las jefas comunales son la minoría en la provincia.
Los Echeveste.
Telén está ubicado en el oeste provincial y tiene 1.240 habitantes según el último censo nacional. Desde 1995 cuatro de los cinco intendentes elegidos fueron Echeveste: entre 1995 y 2007, durante tres períodos, gobernó Alfonso José; y en 2011 su hijo, Pablo, que le ganó al Frepam y dejó el cargo en 2013 para ser director del Banco de La Pampa -lo sucedió Yonhatan Ortiz-. En 2012 ambos quedaron ubicados en veredas opuestas dentro del justicialismo provincial: el padre como diputado provincial con el vernismo y el hijo como jefe comunal con el jorgismo. En la interna del PJ del 5 de julio se enfrentarán otros dos Echeveste: Saúl, actual secretario de Hacienda de la municipalidad, es precandidato a jefe comunal por Compromiso Peronista; mientras que Marcelo Fabián, que en 2011 había enfrentado a Pablo y perdió, será el postulante del vernismo. De esta manera, mantendría esta tendencia.
Historia familiar.
La historia de la familia Echeveste, radicada en la zona de Telén en 1900, está enraizada con la política local, ya sea con el radicalismo o como fundadores del primer peronismo. De hecho, siempre que ha ganado el peronismo, el candidato ha sido Echeveste, y en cuatro oportunidades la fórmula ha sido Echeveste y Echeveste.
José María fue el primero en llegar a la zona. Casado con Estefanía Labadié, tuvieron once hijos -nueve varones y dos mujeres-, que son la primera generación familiar. De éstos, el primer líder político fue Bernardo, que si bien nunca ocupó ningún cargo público, fue caudillo del peronismo en el oeste provincial desde 1945. Fue preso político en 1955 y falleció en 1974. Tuvo cuatro hijos que estuvieron vinculados con la política: su hija Elsa fue concejal en Telén entre 1987 y 1991 y entre 1995 y 1999 por el radicalismo -en tanto una de sus hijas es actual concejal por el Frepam-; Mari militó en la UCR desde 1983; Bernardo hijo fue candidato por el PJ en el 83 y perdió contra el radicalismo; y Domingo Emilio se postuló a concejal en 1995 y perdió la interna en el PJ con la lista Alfonso José Echeveste.
Hijos y nietos.
Los otros hijos de la primera generación, además, le dieron nietos a José María y Estefanía, que también fueron dirigentes locales. Rodolfo, fue el primer intendente de la familia en 1973 hasta el golpe de Estado de 1976. Fallecido su hermano Bernardo, se convirtió entonces en el líder del peronismo local siendo presidente de la unidad básica local hasta 1988. Junto a él en el 73, su hermano José María fue viceintendente. Su hija, Alicia, fue viceintendenta de Telén en 1999 y su nieto Armando ganó las elecciones como vice en 2011 por el PJ, acompañando a su pariente Pablo que encabezaba la boleta.
Otra de las hermanas, Estefanía o “Chicha”, se casó con Benjamín Santos Trapaglia, que fue presidente del BLP, dos veces jefe comunal y gobernador de La Pampa entre 1971 y 1973. Su hijo, Andrés “Aco” Trapaglia fue intendente de Telén cuando su padre fue mandatario provincial y luego durante la dictadura militar en 1976.
Otra integrante de la primera generación, Julia, se casó con Ricardo Alonso y tuvo un hijo que fue concejal del PJ en Victoria, y su nieta es la diputada provincial María Luz Alonso.
Otro de los primeros hermanos, Alfonso, fue padre de Alfonso José (“Alfonsito”) y de Susana Beatriz. Esta fue candidata a jefa comunal en Luan Toro en 1995 y en 1999, cargo que no pudo conseguir, si bien fue funcionaria provincial en el IPAV y el ISS durante el gobierno de Rubén Marín.
Y volvamos al comienzo: Alfonso José o “Alfonsito” ganó la interna del PJ en 1995 acompañado como vice por su primo Pedro Luis -hijo de Pedro, de la primera generación-, a la fórmula que llevaba como postulante a vice a otro pariente, Domingo Emilio. Alfonso, en tanto, fue el primero en llegar a ser diputado provincial en 2011.
Tres mujeres, un pueblo.
Desde 1995, Winifreda es gobernada por mujeres, ya sean peronistas o radicales. Cuando la mayoría de los cargos ejecutivos son ocupados por un varón, desplazando a las dirigentes femeninas, en esa localidad la primacía es de las mujeres.
Entre 1995 y 2003 gobernó la justicialista Adriana García, entre 2003 y 2011 la radical Berta Herlein (en dos oportunidades) y entre 2011 y 2015 otra radical, Marta Graciela Berg. A partir de octubre, cuando se vuelva a votar, la historia puede repetirse o cortarse: Adriana García compite el 5 de julio en la interna del PJ por el vernismo con Hugo Villalba, del jorgismo; y la boleta del Frepam estará encabezada esta vez por Ignacio Martín.
García le ganó en 1995 al radicalismo como una figura nueva dentro del justicialismo local, y estuvo al frente de la comuna por dos períodos. Fue precandidata a vicegobernadora por el FPV en 2003, interventora del PAMI y llegó en 2007 a diputada nacional. Representante del kirchnerismo, dio su vuelco político en 2008 al pasarse al Peronismo Federal renegando de lo que había apoyado poco antes. Después siguió un derrotero sin suerte buscando algún espacio provincial, pero sin posibilidades de sobresalir. Ahora vuelve a recluirse en lo local.
La hora radical.
En 2003, producto de la fractura interna del PJ que dividió sus votos por la postura K de García, la UCR pudo ganar la intendencia y mantenerla por tres períodos bajo las siglas del FRAP en ese año y el Frepam en las dos votaciones siguientes. Primero con Herlein y luego con Berg, que fue concejal de la primera y presidenta del CD durante su gestión. Las mujeres radicales llegaron a ese cargo ya que la UCR se había quedado sin dirigentes hombres de peso. Y en ese marco, Herlein, ama de casa, comenzó a hacerse conocida entre los vecinos como presidenta del nodo local del trueque en tiempos de crisis económica, y Berg, chacarera, ya había sido concejal en los años 90.
En ese sentido, ambas son producto además de una metodología de selección democrática dentro del comité radical local para definir a su candidato a intendente que es poco habitual: primero se hace público quiénes pueden y quieren ser los postulantes y los afiliados hacen conocer sus preferencias de forma secreta escrito en un papel que luego son contados por las autoridades.