“Es un sicópata”, dijo el jefe de la Unidad Regional III

“Es un sicópata, nunca demostró arrepentimiento, no tiene escrúpulos y a pesar que cometió un crimen en ningún momento mostró arrepentimiento”. De esta manera definió el jefe de la Unidad Regional III, José Armando González, a Rodrigo Breitelztein, el autor confeso del crimen de la remisera Alicia Rodríguez Lehr, episodio que conmocionó en los últimos días a gran parte de la opinión pública. El titular policial dialogó con periodistas de Radio Noticias y puntualizó cómo sucedieron los hechos que desencadenaron en la muerte de la mujer. “No podemos asegurar cuándo fue asesinada la mujer porque la autopsia se realizó en Carhué, provincia de Buenos Aires, y los resultados se van a dar a conocer en los próximos días o en el momento determinado”, expresó el jefe policial. Reiteró que el domingo a las 18 fue la última vez que se la vio con vida a la mujer tras haber pasado a buscar por un bar a Breitelztein de 24 años. Dijo que Gastón, hijo de la remisera, fue la última persona que vio con vida a la víctima. “Ella le manifestó a su hijo que el lunes iba a viajar a Bahía Blanca”, sostuvo. Y amplió: “Para la familia, era normal que la remisera se vaya debido a que todos los lunes llevaba a una menor a un colegio de la localidad de Santa Teresa”. González señaló que Gastón se encontró el lunes a la tarde con otro vecino de Guatraché. “Esta persona le manifestó que había estado llamando a Alicia porque su mamá iba a viajar a Bahía Blanca y nunca le había contestado”, dijo. Por este motivo, su hijo se dirigió a la casa de la remisera y corroboró que las puertas estaban cerradas pero sin llave por lo que estaba prendido el televisor y las luces. “El hijo cerró con llave y al día siguiente, a las 7.30, se fue a trabajar inquieto porque la madre todavía no había aparecido”, afirmó al resaltar que, por este motivo, pidió autorización en su trabajo, volvió a su casa y observó que el panorama seguía igual. Cuerpo entre malezas. González continuó con su relato y afirmó que el martes concurrió a la sede policial de Guatraché donde efectuó la denuncia. El jefe policial se acercó hasta la casa de la remisera para ver cómo estaba el lugar. “Su hijo, Gastón, le afirmó a los policías en la casa solo faltó su cartera, su teléfono celular y su auto”, afirmó el entrevistado. Debido a que pasó una importante cantidad de horas desaparecida, los investigadores empezaron a sospechar que se podría haber quedado “encajada” con el auto en algún camino vecinal. Luego, el fiscal de General Acha tomó intervención en el caso y se iniciaron las actuaciones correspondientes por desaparición de personas. “Recolectaron los primeros datos y con una avioneta salieron a recorrer los campos aledaños por lo que se pidieron los números telefónicos que había utilizado la mujer y el último fue registrado a las 22”, puntualizó el entrevistado. Y agregó que a partir de ese teléfono se pudo empezar a contemplar los lugares comunes y a concretar en la búsqueda de nombres concretos. “Comenzó la investigación y le dimos conocimiento a la sede policial de Darregueira, pero nos dijeron que tenía que intervenir La Pampa”, dijo. Y agregó: “La Brigada de Investigaciones llegó a la localidad, realizó un sondeo, y tomó indagatorias hasta que se dio con un vecino que en un predio rural vio el cuerpo de una mujer entre la maleza por lo que tras corroborarse se dio con el cuerpo de la remisera”. Por último, indicó que los efectivos de la Policía Bonaerense detuvo al sospechoso que terminó confesando el crimen. El joven es un alambrador que no cuenta con antecedentes en el ámbito delictivo.

Fuente La Arena

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