Los padres de la beba de nueve meses que supuestamente días atrás no recibió una correcta atención médica en la localidad de Relmo, por parte de una enfermera, dialogaron ayer por la tarde con La Reforma y cargaron nuevamente contra trabajadora de Salud Pública.
Marcelo Burghardt y Lis Pereyra señalaron que la enfermera “mintió” en declaraciones que realizó en este medio gráfico y posteriormente en el canal Todo Noticias; y apuntaron que ayer se reunieron con una conocida abogada de esta ciudad, con el fin de conocer fehacientemente si el Ministerio de Salud de la provincia abrió un sumario por el caso y, por otro lado, evaluar si los dichos de la trabajadora de Relmo constituyen un delito “discriminación”, para realizar una denuncia ante el INADI.
Como este medio gráfico anticipó días atrás, Burghardt denunció en la Fiscalía de turno de los Tribunales piquenses que su esposa debió caminar alrededor de diez kilómetros, con la beba de nueve meses en brazos, porque la enfermera de Relmo no quiso atenderla en la Posta Sanitaria ‘Guillermo De Niro’, ni llamar a una ambulancia que la traslade al hospital de la localidad de Miguel Cané.
En dicho lugar, tras caminar la mencionada distancia, la beba fue examinada por un médico de apellido Crespo y luego derivada al Gobernador Centeno de esta ciudad, donde permaneció alrededor de un día “en observación”.
Posteriormente, la enfermera denunciada, Mercedes Vega, dialogó con La Reforma y aseguró que nunca protagonizó un caso de abandono de persona, ya que le brindó atención a Pereyra cuando llegó a la posta con su pequeña hija.
Burghardt y Pereyra llegaron en la tarde de ayer a la redacción de La Reforma, junto a su pequeña hija Micaela Maribel, y señalaron que venían de reunirse con una abogada del medio, a través de la cual próximamente denunciarían a la enfermera Vega por “discriminación”, ante el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI).
Marcelo Burghardt indicó que “la abogada se va a encargar de averiguar bien sobre la denuncia que hice el lunes pasado (en Fiscalía), porque ella (la enfermera) dice que mentimos y nosotros tenemos papeles” que indican la hora de atención en el hospital de Miguel Cané y los grados de temperatura que presentaba la paciente.
Asimismo, se quejó porque “también dijo que a mi señora le gusta la vida fácil, que es analfabeta y vivimos en un rancho; lo que no impide que atienda a la criatura”, indicó.
“Ahora ella va a tener que dar respuestas sobre lo que quiso decir con lo de vida fácil, porque a ella (Pereyra) siempre la discrimina y le dice cosas”, acotó el masculino.
En tanto, marcó que ratifican todo lo manifestado en Tribunales el último lunes “porque tenemos papeles de los médicos, sobre el traslado que se hizo al hospital de acá”.
Caminata
Por su parte, Lis Pereyra reiteró que el viernes 7 de marzo debió caminar alrededor de diez kilómetros con su hija en brazos, para recibir atención médica en el hospital de Miguel Cané.
Pereyra indicó que en esa jornada llegó a la Posta Sanitaria de Relmo a las 8:00 de la mañana “a decirle a la enfermera que la nena tenía fiebre y un salpullido en el pecho; y ella le levantó la remera y me dijo que era sarampión no contagiosa”.
Posteriormente, Pereyra relató que la enfermera Vega le dijo “buscate quien te lleve a Cané”, como sacándose de encima el caso.
Ante tal situación la mujer intentó entrevistarse “con el intendente, pero no estaba”, por lo que aguardó algunas horas, en las que empeoró la situación de salud de su hija.
Entonces, expresó, “volví a las 2 de la tarde y me dijo que no estaba en horario de trabajo, sabiendo que el salpullido se había extendido por todo el cuerpo”.
Pereyra acotó que ante la negativa de la enfermera decidió caminar hasta la ruta “para hacer dedo” y en ese marco caminó alrededor de diez kilómetros, hasta que “pasó un camionero que me preguntó dónde iba con la bebé, y me acercó hasta la entrada de Cané”.
En tal sentido, relató que antes de llegar al hospital de Cané “la beba (presuntamente) tuvo convulsiones, porque se le iban los ojos para atrás” y que cuando la atendió una enfermera del nosocomio se sorprendió al conocer que había llegado “caminando desde Relmo”.
Ya en el centro asistencial “vino el doctor Crespo y le bajaron la temperatura a la nena, porque con un poco más podía convulsionar”.
Y agregó que, más adelante, “al ver que la temperatura subía nuevamente nos derivaron a Pico, en ambulancia con una enfermera de Quemú” que en esa jornada se encontraba de guardia en el hospital de Miguel Cané.
En el Gobernador Centeno local “nos atendieron muy bien y sobre las 11 de la noche establecieron que era la quinta enfermedad”, y ordenaron que la niña permaneciera internada en el área de Observación, donde evolucionó favorablemente.
Cruce
Consultada si previo a esta situación había tenido algún cruce con la enfermera, Pereyra contestó que “sí, por la entrega de leche para mis cuatro hijos… ella me discrimina por ser paraguaya”, denunció.
En tal sentido, la entrevistada indicó: “Tengo cuatro hijos (la beba y otros tres de 8, 4, 2 años de edad), y ella no nos quiere dar la leche; no porque desde Santa Rosa no se la mandan, sino porque no quiere levantar el teléfono para que se la envíen de Cané”, agregó.
Más adelante los padres de la beba indicaron que este tipo de problemas “también lo han tenido otros vecinos” de Relmo, porque “ella es la que hace todo”, contando con la atención de un médico “una vez por semana”.
Por otra parte, dijeron que con la enfermera Vega “nos cruzamos en Relmo, porque es muy chiquito, pero no nos hablamos” a raíz del caso que tomó estado público, y acotaron que a la Posta Sanitaria de la localidad no regresaron porque “el doctor Crespo nos dio el teléfono y nos dijo que cualquier cosita lo llamemos y nos atiende en el hospital de de Cané”.
Finalmente, dijeron que Vega “mintió” en declaraciones que hizo días atrás a este medio gráfico y también en el canal Todo Noticias “porque dice que yo no volví y sí volví (a la posta); dice que tomó la temperatura de la nena y no lo hizo” como tampoco “vio la libreta de vacunación, porque no la llevé”, marcó Pereyra.
Fuente La Reforma
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