“La certificación de la calidad de los alimentos, su inocuidad y sanidad responderá a los más exigentes protocolos que rigen en la materia. Ésta es una iniciativa muy querida por nosotros, podemos decirle a los apicultores que cumplimos garantizándoles la construcción de un laboratorio para poder certificar la calidad de mieles de La Pampa”, dijo el gobernador Carlos Verna hace 12 años, en el acto inaugural del Laboratorio de Calidad de Alimentos Pampeanos en el predio de la Facultad de Ciencias Veterinarias de General Pico.

Así daba apertura a la actividad de un centro de control de nivel de excelencia que nacía disparado por la necesidad de enfrentar una problemática que atravesaba la actividad de apicultura en momentos que comenzaba a demostrar su potencial productivo. La detección de nitrofuranos (antibacterianos sintéticos) que bajaban la calidad y el precio de la miel era un tema que preocupaba a los productores que, hasta allí, debían mudar las muestras a Bahía Blanca para ser analizadas.

La misión del LabCAP es la de contribuir al desarrollo del sector productivo, especialmente el de la provincia de La Pampa, realizando análisis de calidad e inocuidad de alimentos, procurando que la mayoría cumplan con los requisitos exigidos por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) y los que exijan en la materia los distintos organismos nacionales e internacionales.

También se cuenta entre sus misiones la de emitir certificaciones correspondientes a precios diferenciales para los productores pampeanos. El LabCAP, es una muestra acabada del ejemplo de articulación del sector público con el privado, ya que la composición del mismo contiene al Estado provincial, a través del Ministerio de la Producción, y a la Universidad Nacional de La Pampa, para la prestación del servicio a empresas pampeanas. El acto fundacional consolidó la relación y el nuevo rol para la Universidad Nacional de La Pampa con el Gobierno provincial a través del Ministerio de la Producción a cargo de Ricardo Moralejo (entonces y ahora), y de la Dirección General de Planificación Productiva.

Seguridad alimenticia

La actualidad indica que el LabCAP tiene un rango de actuación ampliado en materia de servicios, si se toma como referencia el acto fundacional. Porque además de continuar con los análisis de los productos apícolas, se han sumado los alimentos en general, agua, aceites, productos farináceos, lácteos, cárnicos y análisis de residuos de glifosato, AMPA, ATRAZINA e IMAZAPIR.

Lejos quedaron las dudas y críticas, algunas mediáticas, respecto al éxito del proyecto y no pocos dudaron de la utilidad de la inversión en un laboratorio de altísima calidad para el análisis de alimentos, hoy gerenciado por Romina Paula Nuñez. Precisamente la profesional junto al doctor Abelardo Ferrán (decano de la Facultad de Veterinarias), María Belén Paesani (directora General de Planificación Productiva del Ministerio de la Producción) y Rodrigo Fernández (director de Extensión del Ministerio de la Producción), como integrantes del directorio del LabCAP, concretaron el lunes pasado una nueva reunión para analizar la actualidad, proyecciones y políticas productivas de interés.

Durante estas reuniones, los representantes provinciales orientan sobre las políticas productivas de interés sobre las que debe trabajar el laboratorio, así como también asiste respecto al plan de negocios que debe abordar el LabCAP para tender a la sustentabilidad económica y financiera. Dentro de los servicios que presta, el ingreso principal corresponde al departamento de Físico Química con un 49%, a través del departamento de Residuos Químicos ingresan el 31% de los fondos totales, mientras que los análisis microbiológicos corresponden al 18% del total de ingresos. El año pasado, el laboratorio comenzó a ofrecer capacitaciones y asesoramientos específicos, que también contribuyen al incremento de ingresos.

Desde la Provincia se gestionan los recursos aprobados por presupuesto provincial para atender gastos de funcionamiento del laboratorio, otros otorgamientos necesarios para la mejora de la infraestructura tecnología y nuevos servicios que pueda prestar el LabCAP en la región pampeana.

El camino hacia el máximo nivel de prestación

NABADI S.R.L., Frigorífico SAIEP (Supermercados “La Anónima”), Frigorífico Pico y varias empresas lácteas se cuentan entre los que requieren de los servicios del laboratorio piquense. Del análisis de la prestación se destacan la rapidez en entrega de resultados, precios óptimos para empresas pampeanas y confiabilidad en los resultados por trabajar con sistema de calidad y comparación de resultados frente a otros laboratorios. Estas características hicieron que el LabCAP haya alcanzado uno de los máximos niveles de calidad.

“Los comienzos fueron difíciles, los primeros cuatro años se tornaron dificultosos para conseguir los certificados de habilitación, hoy cuenta con los mayores estándares de calidad. En el 2011 pudimos ingresar al Organismo Argentino de Acreditación (OAA – entidad a nivel nacional responsable de la acreditación de los Organismos de Certificación y los Laboratorios de ensayos y/o calibraciones) posibilitando los controles para la exportación de miel. A partir de ahí se empezó a equipar el laboratorio para ampliar la matriz de alimentos analizados y empezamos a trabajar mucho con frigoríficos, lácteas, agua, panificados y demás”, señalaron Ferrán y Nuñez.

A su vez se comenzaron a ampliar las certificaciones de control interno para asegurar la calidad de los resultados emitidos. “Hay una política del Gobierno provincial orientada a prestar servicios a las empresas pampeanas, ése fue el sentido principal de la creación del LabCAP, objetivo que se cumplió con el paso de los años. Ahora controlamos frigoríficos pampeanos, municipios, cada vez en mayor medida, y los objetivos planteados se están cumpliendo”, aportó Ferrán.

“El LabCAP funciona por dentro de la Red SENASA desde el año 2011 y en cuanto a análisis internos, nos evaluamos a través del Servicio Argentino de Interlaboratorios”, explicó Nuñez, en referencia al organismo dependiente del INTI que diseña, organiza y evalúa ensayos de aptitud, cumpliendo con los lineamientos de las normas internacionales ISO/IEC 17043. Precisamente en el último “examen” (no obligatorio) anual de agua realizado en el mes de diciembre del año pasado junto a más de 70 laboratorios del país, el LabCAP obtuvo un puntaje del 100 por 100, uno de los tres con puntaje perfecto a nivel nacional.

“Nuestro objetivo es siempre controlar lo que estamos haciendo, como así también seguir un sistema de gestión de calidad que ya está instalado lo cual exige calibraciones de los equipos, capacitación de personal, realización de interlaboratorios, todas cosas que hacen a la calidad de los resultados”, afirmó Nuñez.
Tanto Ferrán, como Nuñez y Paesani coincidieron en presagiar un futuro expansivo para el laboratorio de alimentos siempre y cuando, las políticas económicas y financieras del país lo permitan. “No hay un techo para el crecimiento, dentro de las circunstancias siempre se trata de mejorar y equipar. Hay potencial, incluso está planteado para ampliarse el edificio duplicando la capacidad actual, siempre pensando que se pueden sumar más necesidades de análisis o mejorar la actual”, afirmaron.