La Senadora Nacional María de los Ángeles Higonet asistió al acto del Gobierno Provincial por el Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia e hizo algunas reflexiones.
“Cada 24 de marzo, desde aquel otoño de 1976, llega envuelto en un sinfín de emociones encontradas; este veinticuatro no escapa a su historia. Hoy más allá del dolor que a 39 años nos generan las ausencias de los 30.000 compañeros y compañeras desaparecidos y/o asesinados por la última dictadura militar de nuestro país, podemos disfrutar la alegría de haber vuelto a tomar las calles, en pos de un país más justo y equitativo, tal como ellos lo soñaron.
Hablar de Memoria un día como hoy no es una tarea fácil, no sólo por su connotación histórica de atropellos y agravios a nuestro pueblo, sino también por nuestro compromiso de un presente reivindicativo de la democracia. Como ya todos sabemos, éste es un año de elecciones donde se ponen en juego muchísimas conquistas del pueblo argentino. Debemos comprender que el reclamo por Memoria, Verdad y Justicia que venimos llevando adelante es uno de los logros tan preciados que tenemos que cuidar fervientemente a la hora de ir a las urnas.
Soy una convencida de que la democracia se defiende en el día a día. Siempre fui -por sobre los lugares que me toco ocupar- una militante. Una férrea defensora de las voluntades populares y los derechos de cada individuo. Ver hoy a miles de jóvenes, niños, adultos y abuelos colmando las calles y marchando con alegría es un gran orgullo.
Este 24 de marzo nos encuentra nuevamente unidos en la lucha por una Argentina más democrática, con juicios por delitos de lesa humanidad que se desarrollan a lo largo y ancho del país, con las cúpulas militares de la dictara sentadas en el banquillo de acusados, con genocidas presos en cárceles comunes, y con el legado de transmitirle cada día esta historia a los más jóvenes. Debemos comprender que nada de esto hubiera sido posible sin la voluntad política de un estado presente y comprometido con la lucha por la Memoria, Verdad y Justicia. Esta lucha fue la que llevó a que este 24 de Marzo, por primera vez, Estela e Ignacio Guido Carlotto puedan estar juntos y abrazarse.
Más de 600 genocidas fueron condenados, y 116 nietos restituidos, pero todavía falta desentramar las complicidades civiles y de grupos económicos. Todavía falta conocer lo que pasó con miles de compañeros desaparecidos, y cientos de identidades que fueron robadas. Todavía hay más de 300 nietos que seguiremos buscando. Por esto marchamos, y por esto seguiremos trabajando día a día, tenemos 30.000 razones para hacerlo.”