Muchos hechos acaecidos se conocen, otros son versiones de delitos no confirmados que circulan como reguero de pólvora entre la población, pero que tampoco fueron desmentidos por la policía.
Hace unos quince días atrás, a un hombre que padece de hemiplejia izquierda y disminución visual, identificado como Emilio Fernández (58), le sustrajeron 7.000 dólares y 10.000 pesos en efectivo.
A este caso se le sumó otro confuso episodio en el cual aparece involucrado un jóven que denunció que fue golpeado y abandonado en las afueras de la localidad. Y a ésto hay que sumarle sustracciones menores, como robos de elementos personales en vehículos estacionados, etc. Hasta ahora ninguno de los hechos ocurridos recientemente pudo ser aclarado por la Policía.
La gota que colmó el vaso:
El hecho de hoy, sumado a los anteriores, resultó el disparador de un malestar colectivo en la comunidad.
Sobre las 10,30 hs. de la mañana de éste martes 8 de junio, el jóven Nicolás Coria de 22 años de edad, decide regresar a su casa de calle Palacios, donde reside junto a un amigo a buscar un elemento personal que había olvidado al salir.
Al llegar a su domicilio, se dirige a la puerta de acceso a su vivienda, cuando al abrirla sorprende a tres personas en su interior quienes a punta de pistola lo amenazan: “…flaco, quedate quieto y tranquilo que ya te robamos todo y nos vamos…”.
De inmediato, lo maniataron golpeandoló con el arma en la cabeza, y dandose a la fuga.
Coria, impedido de movilizarse, pide auxilio, pero pasa un largo rato hasta que lo encuentra su compañero, atado de pies y manos, amordazado y debajo de la cama. Les habían robado 600 pesos y dos celulares.