Los concubinatos en 2013 cuadruplicaron a los casamientos

Por Juan José Reyes

Si se toma como ejemplo a Santa Rosa, en 1961 había un 1,5 por ciento de concubinos mientras que en 2001 la cifra aumentó al 21,8%, en 2008 trepó al 32,8% del total de parejas y en 2013, casi la mitad.
Según datos aportados por la Dirección General del Registro Civil y Capacidad de las Personas (matrimonios); Juzgados de Paz de 83 comunas (concubinatos) y el Poder Judicial (divorcios) la realidad demuestra que las tradiciones más conservadoras sobre el estado conyugal de los pampeanos han cambiado el retrato familiar.
En 2013 se casaron 659 parejas (dos igualitarios); hubo 532 divorcios con sentencia judicial firme y 2.612 concubinatos (985 en Santa Rosa, 747 en Gral. Pico y 880 en el resto de La Pampa). El concubinato no registra una situación de pareja real (también se hace para acceder a obras sociales o ingresar al Plan ProCrear), pero una radiografía sobre 10 familias en La Pampa dice que siete están en uniones de hecho, dos son matrimonios civiles y hay al menos uno en situación de divorcio.
En el año que termina de concluir más de la mitad del total de parejas, de entre 15 y 49 años constituidas en La Pampa, están conformadas por las llamadas “uniones libres”, “concubinatos” o parejas consensuales”. O sea, 2 de cada 4 parejas. El aumento del porcentaje de concubinatos en el total de uniones creció más de 5 veces en los últimos 15 años.
Los divorcios, las uniones de hecho, las parejas transitorias, los concubinatos, los ensamblados, las madres solteras -o padres solteros- con hijos, y tantas otras acepciones han cambiado notablemente nuestro pago chico.
Divorcios en aumento, explosión geométrica del concubinato, aparición de nuevas formas de relaciones de parejas (el matrimonio igualitario llego a 14 casos entre 2001 y 2013), multiplicación del número de padres y madres solteros, convivencia de tres generaciones bajo un mismo techo, disminución en la cantidad de uniones formales, menores enlaces católicos y 32 trámites de cambios de género en dos años.

Flojos de papeles.
En concreto, el concubinato es una unión de hecho de una pareja. No hay celebración de matrimonio civil, por tanto no se aplica la ley de matrimonio. Los hijos reconocidos tienen los mismos derechos que los hijos matrimoniales y todos los bienes adquiridos por la pareja de concubinato (siempre que ambos hayan trabajado para obtenerlos) constituyen una sociedad de hecho y al separarse la pareja puede solicitársele al juez la liquidación de la sociedad como si fuera una sociedad civil.
El concubinato fue en alguna época en La Pampa un tema polémico que era visto casi con desprecio. En nuestra sociedad actual, existen cada vez más, familias divididas con el consecuente crecimiento de los divorcios y las uniones de hecho. Como dato alusivo puede decirse que, en nuestra provincia, en 1960 sólo el 7% de las parejas no estaban casados, en 1991 esa proporción había aumentado al 18% y en el presente supera el 45%.
Por ejemplo, en la ciudad de Santa Rosa solamente, en 1961 había un 1,5% de concubinos mientras que en el 2001, la cifra aumentó al 21,8%, en 2008 trepó al 32,8% del total de parejas y en 2013 casi la mitad. Así y todo, las cifras siguen creciendo hasta el punto que en la próxima década se estima que más del 60% de las parejas serán producto de uniones consensuales.
Todo esto lleva a la reflexión de que el concubinato no es algo de pocos, sin relación de continuidad y totalmente al margen de la ley, la última década demuestra lo contrario; es así, que el derecho de daños, mediante sus finalidades de prevención, resarcimiento y punición, no ha dejado de lado ésta realidad familiar, reconociéndole incluso, legitimación a la concubina para accionar por daños y perjuicios; por eso mismo, el derecho debe velar por permitir un reconocimiento integral, frente a la disolución abrupta de esa situación de hecho.

Datos sorprendentes.
Con respecto al total de las Actas de Concubinato puede decirse como lo indica el cuadro anexo, alcanzaron las 2.612 en la provincia, es decir que casi cuadriplicó al de los matrimonios (659). Hubo 985 en Santa Rosa, 747 en General Pico y 880 más en el resto de la provincia.
Si bien es una tendencia mundial, la declinación de los matrimonios clericales es una constante, ya que en los últimos 10 años (según el Anuario Católico de la Iglesia Argentina) la cantidad de contrayentes católicos ha disminuido de 5,89 a 5,42 por cada 1.000 matrimonios en todo el mundo, los números en el país y en nuestra provincia en particular reflejan aún más esta caída.
Las cifras dicen que en la última década la caída de los matrimonios católicos llega al 25%, pasando de seis casamientos por el culto católico a tres sobre 10 contrayentes por Civil. Sin dudas que este panorama se presenta bajo un contexto donde las relaciones personales son cada vez más dinámicas.
Cada vez hay más matrimonios que se separan después de haberse prometido amor eterno, aún en el altar. Con respecto a los matrimonios, que llegaron a 659 en toda la provincia, cae a una tasa del 7% en forma anual, lo que habla a las claras de aquella crisis de convivencia.
Ni que hablar de los divorcios que treparon hasta los 532 casos con sentencia firme en la justicia pampeana y que mantiene iguales guarismos en el último lustro. El dato matrimonial es aportado por el Renaper en La Pampa cuya cabeza visible es Irene Giusti, los que refieren a los divorcios provienen del Poder Judicial de La Pampa y los concubinatos es la sumatoria de cada una de las 83 comunas y comisiones de fomento.

Fuente La Arena

Deje su comentario en Facebook